José Biurrun Manresa es egresado de la Facultad de Ingeniería y tras nueve años de trabajo en Dinamarca regresó al país para compartir sus experiencias en el vasto campo de la investigación y la docencia.
Aunque molesto, el dolor físico se manifiesta por una razón. Se trata de una alerta de nuestro cuerpo sobre algo que no funciona correctamente y necesita ser solucionado. No obstante, en ocasiones esa alarma no cesa y se convierte en un problema generalizado, como es el caso de los pacientes con fibromialgia. José Biurrun Manresa es bioingeniero egresado de la Facultad de Ingeniería de la UNER y ha dedicado su carrera profesional a entender estos procesos, en beneficio de las personas que lo padecen.
“El cuerpo nos avisa que hay algo que puede ser potencialmente peligroso, pero esto puede volverse patológico, un dolor crónico. Entonces el estudio del mismo es importante a la hora de, por ejemplo, entender los mecanismos que generan y mantienen el dolor para poder desarrollar drogas o tratamientos que permitan paliar o curar los síntomas”, explica el investigador.
José egresó de nuestra Universidad y se instaló en Dinamarca para continuar su formación. Allí, en la Universidad de Aalborg, “aportamos conocimiento sobre cómo funcionan el cerebro, la espina dorsal, cómo se comporta el cuerpo ante estímulos dolorosos. Eso era usado por otras personas para desarrollar diagnósticos o tratamientos nuevos, los que eran probados en otros lugares para ver su eficacia”, explicó. El trabajo en ese país “era mucho más específico, proveer de conocimiento básico que era el eslabón de una cadena, y acá es más amplio”, comparó.
Luego de nueve años en Europa, decidió volver a Oro Verde a continuar con su trabajo de investigación en la Universidad. “Una de las cosas positivas es que no solamente pude volver para que el laboratorio tenga más recursos humanos, sino que también vinieron conmigo todos los conocimientos y líneas de investigación”, comentó.
Actualmente en la FIUNER, su equipo de trabajo continúa investigando sobre el dolor, al mismo tiempo que “tratamos de aplicarlos al desarrollo de dispositivos para por ejemplo diagnosticar a través de aparatos, algoritmos. Al mismo tiempo trabajamos en conjunto con el Centro de Medicina Nuclear de Entre Ríos o la Asociación de Fibromialgia de Entre Ríos para entrevistar pacientes, escuchar su problemática y ver de qué manera las cosas que nosotros hacemos se pueden aplicar”.
A continuación compartimos extractos del diálogo que mantuvimos con el investigador.
