“Desde el Proyecto, estamos desarrollando actividades donde compartimos con los vecinos de la ciudad información científica disponible sobre el efecto en la salud de los campos electromagnéticos generados por teléfonos celulares y su infraestructura de antenas”, de esta manera detalla Esteban Rossi director de la propuesta que denominaron“ Directrices para la elaboración de normativas municipales protectivas de la salud, frente a los posibles efectos de Radiaciones electromagnéticas generadas por Teléfonos Móviles y sus Antenas”. Rossi resaltó que durante los meses de diciembre y enero del 2018, realizaron charlas en escuelas vecinales y clubes y recientemente acompañaron a los vecinos del Club Instituto de Paraná con un trabajo interdisciplinario. Obtuvieron como resultado que el Juzgado de Faltas del municipio ordene el desmantelamiento de la antena que se pretendía montar en dicho lugar.
¿Cuál es el problema a resolver?Resulta necesario pensar en nuevas directrices que orienten a la redacción de normativas municipales en cuanto la regulación de teléfonos celulares y sus antenas, que garanticen la salud de los habitantes. El uso de teléfonos celulares creció exponencialmente en los últimos años en todo el mundo, impulsado por una fuerte campaña publicitaria, la proliferación de accesorios integrados a los mismos como cámaras fotográficas, filmadoras y reproductoras de música y video. A esto también se suma una creciente y diversa cantidad de aplicaciones de software que hacen del celular un artículo omnipresente en la vida de las personas.
Datos
En Argentina, según el Informe Técnico INDEC Nº 167/2016 el 80% de las personas mayores de 4 años tienen acceso a celulares. Particularmente en Entre Ríos, según los considerandos del decreto reglamentario Nº 3740 de la ley N° 10.383/2015, hay 12 líneas cada 10 habitantes. Este nivel de uso de celulares y la infraestructura de antenas expone a la población a niveles de radiación electromagnéticas que preocupa a quienes son consciente de ello, por su potencial impacto en la salud, y en particular a los vecinos de la ciudad de Paraná y Paraná campaña que tienen instaladas en su barrio antenas de telefonía móvil y son usuarios intensivos del celular.
¿Cómo se llevarían a cabo las tareas o directrices para lograr esas nuevas normativas?La idea es orientar a los ejecutivos municipales, legisladores y concejales generando espacios donde, conjuntamente con los vecinos, organizaciones no gubernamentales, sectores gubernamentales, científicos y académicos, desarrollen distintas herramientas para que todos estos actores y la población en general, puedan apropiarse de la más reciente y completa información científica disponible a nivel mundial en relación a los campos electromagnéticos y su impacto en la salud humana. El empoderamiento de la sociedad para la reflexión, la toma de decisiones y la acción responsable en base a la información y la evidencia científica es el valioso aporte que el proyecto pretende generar.
Resulta necesario obtener un relevamiento de estudios o información científica…Precisamente, es importante contar con datos en Entre Ríos de estudios in vitro, in vivo o estudios epidemiológicos relacionados a telefonía móvil y su impacto sobre la salud. De esta manera, se garantizará la más amplia difusión de la información científica. El objetivo es articular, con todos los actores de este proyecto, el diseño de un protocolo posible y eficiente de relevamiento epidemiológico de las comunidades que viven en torno de las antenas con más tiempo de existencia en la ciudad de Paraná, y de zonas testigo que no tengan antenas en un radio establecido a partir de herramientas de la epidemiología comunitaria.
Importante
La Organización Mundial de la Salud en 2011, a partir del informe 102 de la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC -en inglés-), ha clasificado los campos electromagnéticos de radiofrecuencia como posibles carcinógenos para los seres humanos (Grupo 2B), basado en un mayor riesgo de glioma, un tipo de cáncer cerebral maligno, asociado con el uso de teléfonos móviles. También existe científicos reconocidos a nivel mundial por la rigurosidad de sus investigaciones como el Lennart Hardell, Alexander Lerchl y el Thomas Tillmann, que están recomendando a la IARC subir la clasificación de riesgo a 2A o 1 para la telefonía móvil.
Sin dudas en este contexto del problema, la demanda viene creciendo…Sí, desde el año 2000 vecinos de distintos barrios de Paraná se vienen manifestando en contra de la instalación de antenas de celulares. Hasta el año 2016 existía en la ciudad una ordenanza que restringía la instalación de nuevas antenas, el 20 de diciembre de ese año es promulgada la Ordenanza N° 9529 que habilita plenamente la instalación de nuevas antenas. Desde allí se comenzó a formar nuevamente un colectivo de vecinos y organizaciones ambientalistas que vehiculizaron sus reclamos vía amparos judiciales, reclamos a defensa del consumidor, convocaron a docentes e investigadores de la Facultad de Ingeniería de la UNER para organizar charlas informativas en los barrio y otras acciones que fueron visibilizando los reclamos.
Esta problemática fue tomada también por Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Paraná y en conjunto con las organizaciones sociales y la Universidad, generaron la primera jornada informativa sobre “Antenas de telefonía y otras redes inalámbricas. Inquietudes respecto a sus efectos en la salud”, encuentro que fue declarado de interés por la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos y por Secretaría de Ambiente Sustentable de la Municipalidad de Paraná. Así, la problemática volvió a tomar visibilidad en los medios locales, y es también donde se gesta la Idea-Proyecto de Desarrollo Tecnológico-Social.
En Paraná se promulgó una ordenanza en 2016, que no contempla los efectos biológicos de las radiaciones no ionizantes sobre la salud y en Oro Verde aún no existe una ordenanza que regule las antenas de celulares. Los vecinos luchan por hacer cumplir su derecho a la salud y el cumplimiento de las normativas, frente a la falta de controles del estado y normativas desactualizadas que datan del siglo pasado como es la Resolución 202/95 del ex Ministerio de Salud, que basa los niveles de exposición a radiación en estudios científicos previos al año 1995 y donde los celulares eran un artículo de lujo y no omnipresentes como lo son hoy.
Contacto: Bioing. Esteban Rossi
erossi@ingenieria.uner.edu.ar