La Editorial de nuestra Universidad, EDUNER, publicó la obra del poeta correntino Francisco Madariaga. Sus trabajos fueron inconseguibles durante un largo tiempo, por lo que esta publicación cobra un enorme valor al recuperar la obra de uno de los escritores más extraordinarios del siglo XX.
Contradegüellos presenta en dos tomos, por primera vez reunida, la obra poética de Francisco Madariaga. El Tomo 1 lo constituye El tren casi fluvial, primer compendio de sus poemas realizado en 1988 por el prestigioso sello editorial Fondo de Cultura Económica; el Tomo 2 reúne los libros posteriores, agrupados bajo el nombre Criollo del universo. La edición suma además textos dispersos e inéditos, fotografías, facsímiles y el CD Sin limosna de imágenes, con la voz de Madariaga y de los poetas que participaron de esta edición. Fue presentado en Caa Cati, localidad correntina que albergó al poeta (ver video).
El proyecto y la dirección de la obra estuvo a cargo de la reconocida ensayista y poeta Roxana Páez, quien desde hace años ha consagrado una admirable tarea al estudio del poeta. Además de la introducción, notas y ensayos de Páez, componen la edición las lecturas de Diana Bellessi, Arturo Carrera, Eduardo Espina, Reynaldo Jiménez, Silvia Guerra, Silvio Mattoni y Liliana Ponce.
En un texto que presenta la obra, el escritor Sergio Delgado escribe: “el neologismo contradegüello que esta edición asume como divisa, constituye una primera clave de lectura. El gesto enlaza, en su abrazo, el pasado, el presente y el futuro de nuestra cultura: hunde sus raíces en el legado gaucho y se proyecta hacia un porvenir en ciernes. Todavía urgente, es necesario volver a escuchar esta palabra nueva, más nueva que nunca en este país –el de Madariaga y el nuestro– cosido entre duelos y guerras internas”.
En 1954, El pequeño patíbulo fue publicado por la revista Letra y Línea dirigida por Aldo Pellegrini, el mismo año en que conoció a Oliverio Girondo. En 1988, salió El tren casi fluvial, reunión de sus diez primeras obras y otras inéditas, donde se encuentran muchos de los poemas más extraordinarios de la poesía contemporánea en castellano. Una década más tarde publicó cinco libros casi seguidos, entre ellos sus crónicas de vida: Sólo contra Dios no hay veneno. Como Juan L. Ortiz, murió en septiembre, el primer año del milenio.
Fuente: EDUNER