Carina Messina, investigadora y docente de la UNER, destaca las medidas de protección que se han tomado en el país hacia los adultos mayores.
Carina Messina, la Licenciada en Trabajo Social y especialista en Gerontología, docente, extensionista e investigadora de la Facultad de trabajo Social de la UNER, reflexiona sobre cómo viven los adultos mayores esta época de cuarentena total. Destaca el desafío que implica la pandemia para los adultos mayores y los cuidados que se deben tomar en torno a ellos.
En dialogo con el programa En Voz Alta de la FM 100.3 Paraná, Messina calificó la situación como “todo un desafío para nosotros, los que venimos trabajando en el tema de gerontología, porque una de las líneas que venimos trabajando desde la Universidad, desde nuestra Facultad, es el tema del viejismo o de los prejuicios negativos que hay en relación a la vejez y no sólo a ella, sino a la vejez en contextos de pobreza. Esta pandemia pone a los adultos mayores en riesgo, con todos los cuidados, pero también ha generado un debate, sobre todo en las sociedades europeas, donde se pone en debate el derecho a la vida o quienes tienen más derecho al uso de los respiradores. Entonces, en algunos contextos, se ha dado esta valoración negativa de la vejez, hacia los prejuicios negativos”.
Sobre la situación en nuestro país, Messina destacó que “por suerte, en la Argentina todavía estamos asistiendo a grandes medidas de protección hacia los adultos mayores, pensando en los cuidados y autocuidados hacia ellos. Creo que el rol del Estado es fundamental para pensar cuales son las posibilidades reales de nuestros viejos de poder cumplir con la cuarentena y si todos tienen las mismas posibilidades. En ese sentido, las redes de sostén, los voluntariados que han aparecido en este momento, las redes de solidaridad con aquellos adultos mayores que no pueden salir de sus casas, que no tienen familiares, con ayuda en las compras de medicamentos, están siendo fundamentales en estos momentos”.
La investigadora afirmó también que “todos han tomado con mucha responsabilidad la cuestión de autocuidados, las medidas de protección, de quedarse en sus casas. También están presentes algunas situaciones de angustias, algunos logran sostener mejor las rutinas que nosotros aconsejamos, que puedan estar conectados como sea, con algún teléfono, con wasap, con redes los que las tienen. Pero también sabemos que algunos no pueden con esto y tratamos de llegar con algunos otros sostenes. Pero, como todos, algunos días se los nota más angustiados, con más incertidumbre, extrañan a sus nietos, a sus familias, a sus grupos de referencias. Y ahí, los sostenes que vamos haciendo día a día, les permiten sortear con mayor optimismo”.